Cómo prepararte físicamente para la temporada de viento

Así como revisas tu quiver y tu neopreno, tu cuerpo también necesita un “tune–up” para aguantar horas de kite, tabla y mar de Cortés. Prepararte físicamente un poco antes marca la diferencia entre disfrutar cada día de norte o terminar reventado después de dos sesiones seguidas. Este artículo te guía, paso a paso, para llegar fuerte, estable y con menos riesgo de lesiones a tus sesiones con Ocean Wind Tribe.

¿Por qué prepararte antes de que llegue el viento?

En la temporada de invierno, los vientos en La Ventana y El Sargento soplan con fuerza y constancia, lo que invita a navegar muchos días seguidos. Si tu cuerpo no está acostumbrado, músculos como piernas, core y hombros se fatigan rápido, y aparecen molestias en espalda baja, rodillas o cuello. Un plan sencillo de preparación física te ayuda a:

  • Tener más resistencia para sesiones largas.
  • Sentir más control en el agua.
  • Reducir el riesgo de tirones, sobrecargas y caídas por falta de estabilidad.

Objetivos clave: core, piernas, hombros y resistencia

El kitesurf mezcla fuerza, equilibrio y cardio. La base está en tres zonas:

  • Core: abdomen, lumbares y cadera mantienen tu postura alineada y absorben los tirones de la cometa.
  • Piernas: se llevan gran parte del trabajo al ceñir, edgear la tabla y aterrizar saltos.
  • Hombros y espalda alta: aguantan la tensión de la barra y ayudan a dirigir la cometa.

A esto se suma la resistencia cardiovascular, que permite mantener buena técnica incluso después de varios waterstarts, caminatas por la orilla y remontadas contra el viento. Con esto en mente, el objetivo no es “ponerte enorme”, sino funcional, estable y fluido.

Calentamiento inteligente antes de cada sesión

Tanto en casa como en la playa, un calentamiento corto marca la diferencia. Antes de entrar al agua, dedica 8–10 minutos a:

  • Movilidad articular: círculos suaves de cuello, hombros, caderas, rodillas y tobillos para “despertar” articulaciones.
  • Activación ligera: mini sentadillas, zancadas sin peso, planchas cortas y movimientos dinámicos de brazos, simulando manejar la barra.

En días fríos o de viento fuerte en El Sargento, este calentamiento también ayuda a sentir mejor tus propios límites y evita entrar rígido al mar, lo que reduce tirones y caídas tontas.

Trabajo de cardio: aguanta más en el agua

No hace falta convertirte en corredor de maratón; basta con darle un empujón a tu capacidad aeróbica 2–3 veces por semana:

  • Opciones suaves: trotar 20–30 minutos, andar en bici o nadar a ritmo cómodo.
  • Opciones más intensas (cuando ya tienes base): bloques cortos de 1–2 minutos rápido y 2–3 minutos suave, repetidos varias veces (tipo HIIT moderado).

Imagina una semana pre–temporada en El Sargento: dos días de trote suave por la playa al amanecer y un día de bici o hiking por los cerros. Esto mejora tu capacidad de recuperación entre tirones fuertes de la cometa y te permite aprovechar mejor cada clase o sesión libre.

Fuerza funcional: ejercicios clave para kiters

La fuerza que necesitas en el kitesurf es funcional, no solo estética. Aquí algunos ejercicios recomendados para 2–3 días a la semana (pueden ser 30–40 minutos):

  • Piernas
    • Sentadillas (con tu propio peso o con mancuernas/mochila).
    • Zancadas hacia adelante y atrás, trabajando equilibrio y fuerza unilateral.
    • Puentes de glúteo para activar cadera y proteger la zona lumbar.
  • Core
    • Planchas frontales y laterales, manteniendo buena alineación.
    • Dead bug o bird–dog (en suelo), para coordinar brazos y piernas sin perder estabilidad en la zona media.
    • Giros controlados de tronco con banda elástica, simulando rotaciones al maniobrar con la cometa.
  • Tren superior
    • Flexiones (pueden ser inclinadas en una mesa o banco si estás empezando).
    • Remo con banda elástica o mancuerna, para fortalecer espalda alta.
    • Elevaciones de brazos con banda, cuidando no forzar hombros.

Haz 2–3 series de 8–12 repeticiones de cada ejercicio, manteniendo la técnica como prioridad. Mejor poco y bien, que mucho mal hecho.

Equilibrio y estabilidad: tu “sexto sentido” en la tabla

El equilibrio es uno de los grandes secretos del control sobre la tabla, en especial con chop o viento racheado. Puedes trabajarlo con:

  • Apoyos a una sola pierna (mantenerte 20–30 segundos por lado, primero en el piso, luego sobre una superficie algo inestable como una toalla doblada).
  • Sentadillas a una pierna asistidas, sujetándote de una mesa o pared.
  • Ejercicios de desplazamiento lateral (pasos rápidos derecha–izquierda) para simular reacciones en el agua.

Incluir 5–10 minutos de equilibrio al final de tus entrenos de fuerza ayuda a mejorar tus reacciones al recibir rafagas, aterrizar un salto o corregir la tabla al ceñir.

Estiramientos y cuidado post–sesión

Después de navegar o entrenar, toca devolverle algo al cuerpo. Enfócate en estirar, al menos 10 minutos:

  • Isquiotibiales y cuádriceps (parte posterior y anterior de muslos).
  • Caderas y flexores de cadera, muy usados al estar semi flexionado en la tabla.
  • Espalda baja y alta, con estiramientos suaves de gato–camello y rotaciones.
  • Pecho y hombros, abriendo la zona que pasa tiempo tirando de la barra.

Puedes sumar 1–2 sesiones semanales de yoga suave o movilidad general. En spots como La Ventana El Sargento, donde los días de viento se encadenan, estos momentos de calma y cuidado ayudan a que puedas seguir sumando sesiones sin cruzar la línea hacia la lesión.

Ejemplo de rutina semanal pre–temporada

Para aterrizarlo, aquí un esquema orientativo (que puedes adaptar a tu nivel y tiempo):

  • Lunes:
    • Cardio suave 25 min (trote o bici).
    • Estiramientos básicos 10 min.
  • Martes:
    • Fuerza funcional (piernas + core + tren superior) 35–40 min.
    • 5 min de equilibrio a una pierna.
  • Miércoles:
    • Descanso activo: caminata larga, movilidad o yoga suave 20–30 min.
  • Jueves:
    • Cardio tipo intervalos (por ejemplo, 1 min rápido / 2 min suave x 6–8 ciclos).
  • Viernes:
    • Fuerza funcional de nuevo, cambiando algunos ejercicios.
    • Estiramientos más profundos al final.
  • Fin de semana:
    • Si ya hay viento, 1–2 sesiones de agua + estiramientos post–sesión.
    • Si no, actividad ligera y movilidad.

La clave es la constancia durante 3–4 semanas antes de que la temporada se ponga intensa.

Llega listo a navegar con Ocean Wind Tribe

Empezar la temporada de viento físicamente preparado significa disfrutar más y preocuparte menos por el cansancio o las molestias. En Ocean Wind Tribe, el equipo acompaña tu progreso en el agua, pero llegar con una buena base física acelera el aprendizaje y te permite sacarle más jugo a cada clase, downwind o sesión libre. Si estás planeando tu próximo viaje a El Sargento, puedes comenzar hoy mismo con esta guía, y cuando el norte empiece a soplar, tu cuerpo ya estará listo para volar.